La cultura corporativa y la identidad visual a través del color y los sentidos

Medimos el mundo a través de la experiencia sensorial, ¿por qué no hacer lo mismo con los espacios que diseñamos? El diseño ya no consiste en que los espacios se vean bonitos, agradables a la vista y ciertamente confortables, sino que persigan la autenticidad en la experiencia arquitectónica.

De los cinco sentidos, lo percibido por la vista tal vez no es el que más recordamos, pero es cierto que las cosas nos entran por la vista, y es allí donde entra en juego el color. Es la mezcla de color, junto con el uso de la luz, el volumen y los materiales lo que permiten que el diseño trascienda a la vista y despierte otros sentidos para hacer un producto brillante. Se habla de una ‘arquitectura sensorial’, donde la atención por la calidad y el detalle encienden los demás sentidos.

Como una partitura, la arquitectura transmite armonía visual y no debe desafinar: cada nota está minuciosamente escogida y ofrece coherencia en el diseño de espacios. En retail o restauración, la elección del color y las texturas aproximan, tematizan espacios y son piezas clave para trasladar un mensaje de coherencia al consumidor en su experiencia de compra.

Además, y al igual que la composición musical, la arquitectura explica una historia, los valores y el recorrido de la empresa, crea una identidad corporativa única y genera una asociación en la construcción de los espacios. Al igual que una pieza maestra, está abierta a la creatividad y no hay que tener miedo a darle forma.

En nuestras nuevas oficinas de GrupIdea y Abessis en Valencia prima la versatilidad del diseño y la polivalencia de espacios, una apuesta donde celebrar reuniones, meetings más informales, compartir experiencias y conocimiento. Se trata de un lugar moderno que, por otro lado, cuenta con materiales naturales y colores amables que identificar con la cultura de empresa.

Los colores del material al natural, como la obra vista o las propias instalaciones eléctricas y aire acondicionado, contrastan con techos pintados de negro corporativo o falso techo continuo blanco en las zonas centrales. En cierto modo, el color y los materiales ordenan el espacio.

De hecho, las últimas tendencias de color en el diseño persiguen esta necesidad de reconexión, orden y autenticidad. En el primer encuentro #trendsCLUB de Cenfim de este 2020, se mostró el azul pantone como color del año que transmite el deseo de reducir nuestro consumo y conseguir claridad en él. Otras tendencias son colores que trasladan a un aspecto más tribal y primitivo, “lenguaje folklórico nuevo, que bebe de la artesanía” o una tercera apuesta con “aires nostálgicos, retrofuturistas y que se recrean en la fantasía”.Como dice una conocida canción de Tontxu, “somos de colores”.