«El estudio de Gaudi, el taller de un loco o un genio» por Marià Marìn i Tornè en Museo Diocesà de Barcelona
El 21 de junio de 2012 se celebraba en el Museo Diocesano de Barcelona la presentación del Espai Gaudí “El taller de un genio o de un loco”. Miquel Àngel Julià Hierro, director de diseño y estrategia en Grup Idea, hizo la presentación de la exhibición en compañía del historiador y comisario del espacio Marià Marín y Torné, quien años más tarde sería el cofundador de The Gaudí Research Institute (TGRI).
Grup Idea participó en la presentación de la exhibición y celebró una edición de Idea Pika Pika, un evento de networking en la misma sala, después de la ponencia de Marín. En su primera intervención, el historiador habló de la figura de Antoni Gaudí, su punto de vista más empresarial a partir de una serie de anécdotas a lo largo de su vida. Su método de trabajo, interdisciplinar, innovador y centrado en la búsqueda del detalle inspira los trabajos de Grup Idea día tras día. En este artículo reunimos punto a punto las anécdotas del Gaudí empresario tal y como las presentó Marià Marín en la ponencia:
- La inspiración en la naturaleza y una gran ambición. La naturaleza ha creado formas que son funcionales y por tanto óptimas. Gaudí se inspiró en las formas de la naturaleza en su arquitectura, pero le sorprende que nadie antes lo haya llevado a la práctica. “Mis ideas son de una lógica indiscutible, lo único que me hace dudar es que no se hayan aplicado anteriormente”, afirma. Aún así, se dice a sí mismo que “el hecho de que una cosa no se haya hecho nunca, no significa que no tengamos que intentarlo”.
- El impulsor del I+D: investigación y desarrollo. Para llevar a la práctica unas formas constructivas y arquitectónicas nuevas, Gaudí incorpora un ingeniero en su estudio y construye la famosa maqueta polifunicular, que tarda 10 años en llevar a cabo. Para conseguir la ansiada tricromía en las cristaleras, busca un óptico en la universidad y un químico en la escuela industrial. En la escuela industrial se encuentra precisamente el primer laboratorio de ensayo de materiales de Europa. Trabaja con una hipótesis y la lleva a cabo.
- La importancia del equipo interdisciplinar y la escucha activa. Los informáticos que actualmente trabajan los cálculos de la estructura con supercomputadoras no entienden como Gaudí hizo los cálculos con las herramientas que entonces tenía. ¿Cómo lo hace? A través de su equipo: un chaval de 14-15 años, un albañil y un ingeniero. El ingeniero le será útil para realizar los cálculos, el albañil tiene experiencia en la construcción y el chico joven será un aprendiz eficaz pero, sobre todo, pedirá el porqué de todo lo que los otros no se atreverán a preguntar.
- Colaboradores, que no discípulos. Para las obras del Parc Güell, Gaudí se rodea de colaboradores, entre ellos, Josep Maria Jujol. Jujol se encarga de buena parte de la decoración en la técnica ‘trencadís’, como es el caso del banco de la plaça de la Natura. Algunos de los bancos de la Colonia Güell vienen también firmados por los artesanos que los hicieron.
- La estética y la funcionalidad. ¿Qué idea tengo?, ¿qué es el arte?, ¿y la belleza? Resplandor de verdad. Y la verdad es Dios. ¿Y cómo reflejo esto? Muy fácil: si la arquitectura que hago no es racional y útil, además de bonita, me he equivocado. En palabras de Gaudí: ”de qué sirve todo esto que digo si antes de la técnica no pongo el corazón”.
- La sostenibilidad, la búsqueda de la diferencia. La idea de la funcionalidad la aplica al diseño y a la construcción de sus obras. Es sostenible y tiene una fuerte inclinación hacia el reciclaje.. En sus obras se apoya en sus colaboradores, aprovecha la luz y no genera reverberación en ningún espacio. `La originalidad sirve como vuelta al origen», afirma.
Puedes ver la ponencia de Marià Marin i Torné, historiador y comisario de «Gaudi’s Study» en el Museo Diocesano de Barcelona en el siguiente vídeo (en catalán):
